La legislatura de la salud
Esta ha sido algo más que la legislatura de la pandemia del COVID-19. La salud ha estado en el primer nivel de preocupación de este Gobierno, con un enorme esfuerzo inversor, organizativo y normativo. Pero además ha sido también la legislatura de las  obras en centros de salud y hospitales, de la tecnología y medicina personalizada, de la ley de eutanasia, de  la empresa pública de transporte sanitario, del nuevo calendario de vacunación, de la ampliación de programas de cribado en cáncer, de la innovación en inteligencia artificial, del refuerzo de la investigación, de la asunción de la sanidad penitenciaria, del liderazgo en trasplantes,  de la prevención y promoción de la salud en clave comunitaria.
 

Apuesta por los y las profesionales del sistema sanitario
Tanto en su vertiente laboral como organizativa, revirtiendo déficits estructurales, algo no exento de complicaciones. La actual legislatura acaba con más personal contratado en el Servicio Navarro de Salud - Osasunbidea, con más porcentaje de profesionales fijos y con una mejora de sus condiciones retributivas en una apuesta que va más allá del marco temporal de esta legislatura como se ha visto en el incremento de plazas MIR (el doble en Médicos de Familia) y en las OPE, que tienen como objetivo sacar de la eventualidad a más de 3.000 profesionales sanitarios.